El cuento y la novela
Este Curso de Técnicas Narrativas y Escritura Creativa está pensado para introduciros en las técnicas básicas de narración enfocadas al relato corto o cuento, como nos gusta más llamarlo. La novela es otro de los subgéneros literarios dentro del género narrativo. Esta entrada es para dejaros clara la diferencia entre cuento y novela. Según opinión de escritores consagrados, es más difícil escribir un buen cuento que una buena novela. Al cuento no puede sobrarle ninguna palabra…
Nota previa:
Como en toda creación del intelecto humano debemos tener presente que existen zonas ambivalentes, tierras comunes donde no es fácil deslindar dónde termina uno y comienza la otra. Existen creaciones híbridas que si alguien explorara podrían generar una nueva gama creativa, como ya ocurriera con la prosa poética, que los expertos encuadran en el género lírico y no en el narrativo por mor de su finalidad.
No existe una definición única para distinguir entre novela y cuento como si de setas se tratara, por lo que es preciso desgranar características de una y de otro. El conocimiento de todas ellas nos aproximará a ser capaces de discernir si estamos ante un cuento o ante una novela.
Diferencias:
Si preguntáramos a un número elevado de personas, la mayoría dirían que la diferencia entre cuento y novela radica en la extensión. No andan muy desencaminados, pero existen novelas cortas y existen cuentos largos, por lo que recurrir al número de páginas o de palabras no es una herramienta totalmente válida. Recuerda las zonas ambivalentes…
El cuento tiende a ser conciso y presentar un único clímax, y es protagonizado por un grupo muy reducido de personajes, con un argumento relativamente sencillo. La novela suele desarrollar tramas secundarias con mayor número de protagonistas cuya personalidad se suele desarrollar.
En el cuento por lo general existe una sola acción central y suele predominar la narración sobre los diálogos y las descripciones, típicas de la novela, aunque podemos topar con novelas que se ajusten a esta característica del cuento.
El cuento recrea situaciones, y lo hace con economía de recursos narrativos, mientras la novela recrea mundos y personajes, y lo hace con profusión.
Dejemos que Julio Cortázar, uno de los maestros cuentistas en lengua castellana, defina el cuento:
Un cuento es un relato en el que lo que interesa es una cierta tensión, una cierta capacidad de atrapar al lector y llevarlo de una manera que podemos calificar casi de fatal hacia una desembocadura, hacia un final.
Ejemplos:
Lewis Carroll escribió Alicia en el País de las Maravillas y su continuación, Alicia a través del espejo, como cuentos y no como novelas, pero su extensión supera al modelo de cuento que podamos tener en mente. Silvia y Bruno es otro cuento del mismo autor, y su extensión es aún mayor.
Cuentos largos son La metamorfosis, de Franz Kafka, o La sala número 6, de Antón Chéjov (aunque para algunos expertos son novelas cortas). Empero existen novelas cortas de menor extensión que algunos cuentos largos, como El licenciado Vidriera o Rinconete y Cortadillo, de Miguel de Cervantes, que forman parte de su serie Novelas Ejemplares.