Una vuelta al mundo con 6 juegos (y día 10)
Mañana gris en el mes de las vacaciones escolares. Nada es lo mismo que ha venido siendo durante el curso: ni los recreos ni las actividades ni los exámenes, que se recrudecen.
Sin embargo hoy nos han visitado ocho xianqineros que se han llevado la sorpresa, al ver montados los tableros y las fichas de este ajedrez chino, de que no jugamos al xiangqi sino al banqi. Y apostaría a que ha gustado.
Al banqi o ajedrez oscuro (aunque tengo para mí que la traducción más apropiada de dark chinese chess es ajedrez oculto) se juega en la mitad de un tablero de xiangqi y las fichas se colocan en los recuadros y no en las intersecciones.
Como esta bitácora es para jugones, qué os vamos a decir que no sepáis del banqi. Pero para los que no sabían de la existencia de este otro juego fresquito seguro que en Internet encontráis algo. También podéis buscar como anqi o incluso como an qi.
Animada estuvo la mañana y juguetonas las chicas, que traían un juego inventado por ellas que se llama «Soy Pepe». Se sentaron a jugar al banqi, echaron un par de partidas (con preguntas que mostraban el interés que tenían en el nuevo juego), pero la sangre, alterada por la primavera que ahora acaba, no las dejó estar sentadas mucho tiempo más, por lo que los cinco últimos minutos del recreo, al filo del mediodía, se los pasaron jugando en la pizarra a juegos de lápiz y papel.
Os dejo un par de fotos de una de las cuatro mesas que se dispusieron. En la segunda podéis ver en acción a «Soy Pepe». ¡Estas crías…!
La partida de banqi se ha puesto interesante
¡Soy Pepe!