Nuestro debut internacional

El pasado jueves, a última hora de la mañana, nos llamaba el director del IESO El Sueve para pedirnos que colaboráramos con el instituto en un intercambio cultural con alumnos llegados desde un centro escolar de Challans, Francia, ciudad ubicada en la histórica provincia de Poitou. Dieciséis jóvenes de 14 y 15 años se llegarían hoy lunes hasta la comarca de Picos para practicar el castellano y disfrutar de unas jornadas de convivencia con alumnos de los institutos de la zona. En el IESO les tenían preparadas varias actividades pero les faltaba una guinda para rematar la mañana como merecían sus huéspedes.

La petición consistió en que presentáramos un juego que estimulara a la mocedad venida del otro lado de los Pirineos a practicar nuestro respetado castellano.

Rápidamente pensamos en Érase una vez…, pero tras una llamada de urgencia a la única tienda friki de Asturias, Pegasus Oviedo, nos caímos de la burra. Necesitábamos cuatro copias y no había tantas en stock en esos momentos. Cierto es que tampoco pensamos en los Rory’s Stories Cubes, más baratos y quizá tan útiles para la ocasión como el juego de cartas.

Así que pusimos manos a la obra y para el viernes a mediodía ya teníamos diseñada una versión moderna del Érase una vez… Sólo quedaba hacer fotocopias sobre cartulinas y recortar al tamaño apropiado.

Hoy a las 13:00 asistimos a nuestro debut internacional. En la biblioteca del centro separamos a la muchachada en cuatro grupos y les mostramos las más básicas reglas del juego sin incidir mucho en las mecánicas, pues el objetivo de su viaje era practicar el castellano y no aprender un nuevo juego (Il etait une fois… en francés).

Hay que reconocer que el juego se las trae para construir la historia en nuestro idioma materno, cuanto más para tejerla en otro idioma que sólo estudias en el instituto (y más aún si tienes 14 ó 15 años). Pues se batieron como jabatos. Y hubo un par de ellos que se lanzaron y encadenaron palabras y conceptos con maestría. Alguno hubo que se vio frenado por la barrera del idioma, aunque a juzgar por la conversación con sus mentores de espagnol sabían lo que querían, pero las palabras no acudían con la fluidez que deseaban. Eso sí, todos colaboraron y trataron de aportar para construir la historia que estaba teniendo lugar en su mesa de juego.

Al final, como siempre que se juega con limitación de tiempo, se nos echó la hora encima. Yo diría que la propuesta gustó tanto a los chavales como a los profesores. Sirva como muestra la anécdota:

A Agustín, nuestro monsieur le directeur, que no conocía este juego, también le gustó lo que vio y las posibilidades pedagógicas que tiene el invento, y se las prometía muy felices pensando en aprovechar las cuatro copias de nuestra cover version para emplearlas en sus clases de literatura creativa. Pero a mí, que no sabía de sus intenciones, se me ocurrió decirles a los chavales que si les había gustado el juego que se lo llevaran para practicar el castellano… y no dejaron ni las gomas con que llevé atado cada paquete de cartones. 😉

Así que a falta de que por gentileza nos digan que les gustó lo que hicimos para ellos doy por sentado que les gustó de verdad.

Tenemos que agradecer desde estas líneas —y es de justicia hacerlo— la confianza que Agustín García ha depositado en Juego Sí para trance tan delicado como éste, porque hay que reconocer que su imagen como organizador, la imagen del IESO El Sueve como anfitrión, e incluso la imagen del pueblo como marco de este intercambio cultural internacional, estaban en juego (y estaban en juego aunque a los mandatarios locales —enormemente preocupados estos días por que no les quiten la silla— y a las gentes del pueblo —indolentes siempre hasta el hartazgo con todo lo que no sea su ombligo— les traiga sin cuidado la deteriorada imagen que tiene su pueblo).

Os dejamos un par de instantáneas en las que, como es preceptivo, nos hemos tomado la libertad de pixelar el rostro de los menores de edad. Merci beaucoup mes amis et bon voyage de retourne a votre maison.

 la biblioteca del IESO El Sueve acogió unas sesiones de Érase una vez…
La biblioteca del IESO El Sueve acogió unas sesiones de Érase una vez…

 el juego gustó a los participantes a juzgar por su implicación
El juego gustó a los participantes a juzgar por su implicación