La final del torneo de Risk: Highlander
Este próximo domingo día 8 de marzo, a las 17:00 horas, en el lugar de costumbre, tendrá lugar la final del torneo de Risk. Seis riskeros en un único tablero se verán las caras al más puro estilo Highlander. Nada de objetivos intermedios ni de misiones secretas: aquí gana el que resista. Será una partida no apta para pusilánimes. Con sólo siete territorios de inicio para cada general, y con una dispersión que hará crujir los dientes a más de uno, nadie podrá fiarse de amigos ni tampoco despreciar ningún tipo de pacto con enemigos. Habrá que crear alianzas y saber traicionar antes de ser traicionado para asestar el machetazo final. Los fallos no están permitidos. Cualquier patinazo puede pagarse con la exclusión inmediata. Para los más tahúres anticipamos que los dados (tanto los rojos como los azules) serán comunes para todos los jugadores.
Ni Patton, ni Clausewitz, ni Rommel, ni Zhúkov, ni Federico II, ni el Gran Capitán… Napoleón y Julio César pasan por ser los mejores estrategas de la historia, pero mucho me temo que en esta partida no pasarían de meros figurantes habida cuenta de la calidad de los maricales de campo que se medirán entre sí.
Para los que vayan cayendo eliminados tenemos preparados otros juegos muy atractivos, tanto que a lo mejor es más jugoso el premio de disfrutar con las nuevas propuestas que sufrir la agonía del constante crepitar de nervios durante la batalla completa de Risk. Quizá la resolución pase de las tres horas.
La conquista del mundo es cosa de seis y tras hacer los deberes el viernes, el sábado permanecerán concentrados leyendo clásicos como los de Sun Tzu y Sun Bin, o como los de Maquiavelo o los del mismísimo Karl von Clausewitz, sin despreciar los de Moltke el viejo.
El domingo sólo puede quedar un… Highlander.